Consultoría
Morvedre Eficiencia ofrece los servicios de consultoría para aquellos negocios o empresas que requieran de un control de sus gastos energéticos, incluso también para aquellos pequeños negocios interesados en reducir el coste de sus facturas.
Los servicios de consultoría se componen, según el nivel de control sobre el gasto y consumo energético, en cuatro tipos de seguimiento:
Plan Básico
El cliente pone a disposición de Morvedre Eficiencia las facturas energéticas y se realiza un estudio de sus condiciones de consumo y contrato; concluyendo en un ajuste de los términos de contratación y, en algunos casos, de un cambio en los hábitos de consumo. Tras este estudio, la facturación se verá reducida; comenzando a ver resultados desde el primer momento.
Plan Seguimiento
Incluye el estudio inicial y las medidas de ajuste del Plan Básico. Posteriormente, Morvedre Eficiencia realizará informes periódicos con los resultados de los ajustes realizados, tanto económicos como energéticos, que justifiquen los cambios y controlen la facturación; prestando así un servicio continuo de consultoría.
Plan Control
A los servicios del Plan Seguimiento, se le une la instalación de un medidor de energía conectado a red; que emite en tiempo real los consumos y permite el acceso a los valores controlando los excesos, conociendo los hábitos y, también, los defectos o fallos de suministro que se puedan producir.
Con toda la información en tiempo real, se pueden implantar medidas específicas para cada momento o proceso productivo del cliente; así como programar una serie de alarmas que permitan corregir las desviaciones de consumo, sin esperar a la finalización del periodo de facturación.
Plan Gestión
El Plan Gestión consiste en la implantación de un sistema de gestión de la energía (SGEn) consistente en la monitorización de consumos de las distintas instalaciones del cliente, incluso de procesos específicos de la instalación; dando datos concretos de dónde y cómo se consume la energía. Además de monitorizar los consumos, el SGEn también proporcionaría alarmas en desviaciones de consumo e, incluso, la posibilidad de actuar sobre la instalación.
Los sistemas de gestión energética se implantan tras la realización de una auditoría energética y reemplazan la obligatoriedad de realizar dichas auditorías energéticas cada cuatro años, como marca el Real Decreto 56/2016.